Los motivos por los que las familias empresarias necesitan un Consejo de Familia son muchos y muy diversos. Este es el máximo órgano de gobierno del ámbito familia, por lo que se encarga de canalizar y resolver todos aquellos asuntos que afecten exclusivamente a la familia empresaria y a la relación familia-empresa. Así pues, es clave para la continuidad de muchas empresas familiares.
Como quizá ya sabéis, se trata de un órgano para-social en el que se reúnen todas las ramas familiares. Es decir, no es obligatorio. Hay familias en las que algunos miembros tienen ciertas reticencias al Consejo de Familia, pero estamos convencidos que después de ver todas las ventajas tomaréis conciencia de sus ventajas.
Dicho esto, acto seguido enumeraremos brevemente algunas de las ventajas de tener un Consejo de Familia. Si queréis profundizar en estos motivos, podéis consultarnos o también podéis hablar con una familia empresaria que disponga de uno. Nadie mejor que alguien que se encuentra en vuestra misma situación para profundizar y explicaros en base a su caso real qué os puede aportar.
10+1 motivos para tener un Consejo de Familia
- Es un órgano que cuida la unidad familiar y accionarial y que es garante de la armonía familiar.
- Un Consejo de Familia es el mejor foro para transmitir los valores y el legado a la siguiente generación.
- Dado que en un Consejo de Familia se comparte información y se promueve la comunicación, es un órgano que contribuye a la transparencia y la confianza de los familiares.
- Garantiza que las expectativas de los familiares y la estrategia de la empresa están alineadas y que se protege el patrimonio familiar. Esto es clave para tener visión compartida y lograr la continuidad.
- Ayuda a separar los ámbitos familia-empresa-propiedad. Esto evita que las posiciones personales de los familiares interfieran en el funcionamiento de la empresa familiar.
- En un Consejo de Familia se previenen, en la medida de lo posible, los conflictos familiares. En caso de que surjan, sirve para que se aborden y resuelvan sin poner en peligro la eficacia empresarial y la armonía familiar.
- Este órgano “entrena” la Propiedad Responsable y es un instrumento para la profesionalización. También promueve el espíritu emprendedor de la familia.
- Educa y brinda formación por rol a la familia empresaria, con especial énfasis en las nuevas generaciones.
- Es el órgano para prever, planificar y avanzar en el relevo generacional.
- Por último, el Consejo de Familia impulsa el desarrollo y actualización del Protocolo familiar y asegura su cumplimiento.
Y llegamos al motivo extra. Afortunadamente, no es lo habitual, pero a veces suceden desgracias en los que tener un Consejo de Familia será clave. El papel de este órgano durante los momentos difíciles, como lo fue el coronavirus, es el de invertir tiempo en la familia empresaria, pensar, planificar y tomar decisiones sin caer en la parálisis.