En generaciones tempranas, toda familia empresaria suele enfrentarse al reto de la profesionalización del negocio familiar. Y, para conseguirlo, deberá superar las barreras a la profesionalización, muy presentes en el día a día de la mayoría de empresas familiares.
Entre estas barreras a la profesionalización encontramos el éxito, el miedo a perder el control del negocio por parte de la familia, las dificultades para delegar, tener las posiciones directivas “reservadas” a miembros de la familia o la lealtad a los empleados “de toda la vida”. Una vez asumida la necesidad de profesionalizarse, y una vez la familia ha aceptado el reto y el compromiso de hacerlo, conocer estas barreras y aceptar que algunas de ellas están o pueden estar presentes en nuestro negocio, nos ayudará a superarlas.
¿Cómo superar las barreras a la profesionalización?
No hay una fórmula mágica para superar las barreras a la profesionalización, pero sí que puedo daros algunas pautas que os facilitarán la tarea.
- Puede seros de ayuda acudir a casos de éxito de otras familias empresarias ya profesionalizadas, que os sirvan como ejemplo para vuestra propia situación.
- También suele funcionar muy bien que alguna persona de la familia, preparada y formada, lidere el proceso de profesionalización.
- Internamente deberá haber un diseño adecuado de la estructura organizacional y de los órganos de gobierno. El Consejo de Familia y el Consejo de Administración tendrán un papel clave en la profesionalización.
- La planificación a nivel de recursos humanos también será muy importante para superar las barreras a la profesionalización. No hay que dejar que el apellido influya en la política de contratación de Recursos Humanos. A partir de la profesionalización, habrá que contratar a los mejores profesionales que nos podamos permitir, sean o no de la familia.
- También necesitaremos unas normas claras en cuanto al acceso a un puesto de trabajo en la empresa familiar para los familiares, los familiares políticos y la familia extensa y en cuanto a la política de selección y retribución así como para desarrollar el talento familiar y no familiar en la empresa.
- Y, si lo necesitáis, tenéis la opción de pedir consejo a asesores externos expertos en empresa familiar para que os orienten en el proceso de profesionalización.