En este artículo nos centraremos en la formación de los familiares como accionistas responsables. Tal como ya hemos hablado en otros artículos, una adecuada educación de la propiedad es fundamental para tomar las mejores decisiones en cada momento. Existen unos conocimientos troncales mínimos sin los cuales sería muy complicado, por no decir imposible, ejercer de buen propietario.
Por esta razón, la familia empresaria deberá dedicar tiempo a planificar debidamente la formación de los familiares propietarios. En el caso de disponer de Consejo de Familia, este será el órgano de gobierno encargado de asegurar una buena educación de la propiedad y de que existe un seguimiento.
Contenido de la formación de los familiares
Para poder actuar como accionistas responsables de una empresa familiar, deberéis tener una formación suficiente y unos conocimientos mínimos necesarios, que variarán en función del rol que desempeñéis en la familia empresaria. Es decir, aunque la educación de la propiedad debe ser común, hay que adaptarla a los diferentes ciclos vitales de la empresa familiar y a la situación de las personas. Unos necesitarán más conocimientos y formación de negocios y del ámbito financiero y otros, en cambio, una educación más encaminada a actuar con responsabilidad desde la propiedad.
La formación de los familiares más jóvenes les brindará las aptitudes y conocimientos necesarios para tomar el relevo con éxito, les despertará el espíritu emprendedor y les brindará unos mínimos conocimientos de economía, finanzas y del sector. Nuestro consejo es que no aplacéis este tema y que os atreváis a hablar con los niños, ya desde pequeños, sobre la empresa familiar. Algunos temas importantes que podéis tratar de introducir son el dinero, la prudencia a la hora de gastar, saber ahorrar, vivir con un presupuesto, la importancia de invertir con sentido, la contribución que se hace a la sociedad desde la empresa familiar, etc. Si no lo hacéis, el distanciamiento con el negocio, unido a la falta de educación desde edades tempranas, podría condicionar el futuro relevo generacional.
En este punto debemos introducir un matiz. Lo que acabamos de explicar no debería llevarnos a la conclusión de que solo deben recibir formación los familiares más jóvenes. Más bien al contrario. Si se quiere actuar como accionista responsable, es importante que la formación sea continua, puesto que todos podemos seguir aprendiendo y mejorando a lo largo de los años.
5 claves de la formación como accionistas responsables
Concluimos este artículo con 5 claves para enfocar la educación y la formación de los familiares como propietarios responsables. Las hemos extraído del estudio «Perspectives on Responsible Ownership», realizado por el Institute of Family Business:
- Desarrollar un programa educativo que enseñe las virtudes, los valores y la historia de la familia.
- Tener unos mínimos conocimientos financieros que permitan leer e interpretar cuentas de pérdidas y ganancias y balances. También se debe completar lo anterior con formación como inversores y con un ABC de nociones de economía y comercio.
- Comprender los deberes legales y fiscales.
- Aprender a tomar decisiones por consenso, si es conveniente, apoyándose en asesores externos.
- Participar en reuniones familiares relacionadas con el rol de propietario.
Para acabar, queremos recordaros que es importante ser honestos con uno mismo, con la familia y con la empresa, así como ser humildes y reconocer cuando no tenemos la formación adecuada.
Y, si por falta de estos conocimientos no somos capaces de tomar decisiones matizadas y complejas, tendremos que buscar asesoramiento externo.
Una respuesta a “Aprendiendo a ser accionistas responsables”
[…] familiar hay que invertir tiempo en formar a la familia empresaria en las buenas prácticas de la propiedad responsable. El objetivo es que entienda la importancia de tener ejecutivos y consejeros no necesariamente […]