Crear puestos a medida para los familiares es una práctica recurrente en muchas empresas familiares no profesionalizadas. Esta es la vía que la familia encuentra para satisfacer las necesidades de empleo de sus miembros. Pero, lamentablemente, es algo que a menudo acaba siendo negativo para la persona, para la empresa y para la familia.
Generalmente cuando se crea un puesto a media en una empresa familiar es porque aquella persona tiene un encaje difícil en los puestos del organigrama. Esto puede ser porque estos están ocupados o bien porque el familiar en cuestión, por su perfil y competencias, no encaja en ninguno de los puestos existentes.
Si los puestos están ocupados, la persona tiene competencias y potencial y se le crea un puesto “temporal”, a la espera de que se produzca una vacante en la empresa familiar, el problema de los puestos a medida es menor. Sin embargo, cuando jugamos a ser ingenieros para inventar un puesto que se adapte a un familiar que no tiene ni el perfil, ni la formación adecuada para el cargo, ni las competencias mínimas, estamos delante de un grave caso de nepotismo que suele traer consecuencias negativas.
Los riesgos de crear puestos a medida en el negocio familiar
Los puestos a medida son difíciles de gestionar y de entender, especialmente si la persona depende de profesionales que no son de la familia. Además, al no ser posiciones claras y legitimadas, pueden conllevar disfunciones, sobre todo si la persona no actúa con prudencia y utiliza en su favor el ser miembro de la familia.
Asimismo, también conllevan un riesgo para la innovación, ya que el hecho de crear puestos a medida para familiares supone una barrera a la entrada de talento externo y puede hacer que nos instalemos en la zona de confort.
Por esta razón, os recomiendo actuar como accionistas responsables y elaborar unas normas claras de acceso al trabajo para los familiares. Es importante incluirlas en un Protocolo familiar, y deberán ser conocidas y respetadas tanto por la familia como por el departamento de Recursos Humanos.
No podemos olvidar que los cargos no vienen por herencia y se tienen que ganar por méritos. De aquí la importancia de que, desde edades tempranas, la generación entrante sepa que para poder trabajar en la empresa familiar y para poder ocupar cargos en la gestión y en el Consejo de Administración es obligatorio alcanzar un nivel formativo determinado, poseer una cierta experiencia profesional y desarrollar nuestras habilidades, a poder ser fuera de la empresa familiar.
La excepción a la prohibición de crear puestos a medida en la empresa familiar
Sin embargo, y a pesar de lo dicho anteriormente en este artículo, existe una excepción. Hay una tipología de puestos a medida que creo que sí que debe existir en las empresas familiares, porque ayuda a fortalecer valores y fomenta la cohesión de la familia empresaria. Se trata de los puestos creados para familiares que están afectados por una enfermedad que les imposibilita encontrar un puesto de trabajo fuera del negocio en igualdad de condiciones que el resto de familiares.
Esta excepción se debe incluir en el apartado del Protocolo familiar sobre la regulación del acceso al trabajo por parte de la familia. De darse el caso, será el órgano de administración quien posibilite la incorporación del familiar al negocio. Y se hará a sabiendas de que la incorporación no responde a intereses de la empresa familiar, sino que se está creando un puesto a medida del miembro de la familia afectado para proporcionarle una situación de seguridad y de bienestar.
Una respuesta a “Razones para evitar los puestos a medida en el negocio familiar”
[…] algunos casos, una zona de confort en la empresa familiar puede estar relacionado con crear puestos a medida para miembros de la familia. El hecho de ser «a medida» lleva implícita la aceptación de que el […]