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holding familiar

Holding familiar: Qué es y cómo puede ayudarnos

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Recientemente nos han llegado algunos casos de familias empresarias que están considerando poner en marcha una holding familiar y que necesitan asesoramiento. Se trata ciertamente de una opción interesante para grupos de empresas familiares que con el tiempo han ido creciendo, diversificándose y desarrollando nuevas actividades y líneas de negocio.

Una holding familiar es una sociedad holding, pero aplicada al ámbito de la empresa familiar. Esta estructura implica que hay una sociedad matriz, que ostentará las participaciones de las sociedades dependientes (las distintas empresas familiares). Por tanto, una de las condiciones para constituir una holding familiar es que exista más de una empresa familiar, que pertenezcan a la/s misma/s familia/s y que actúen como una sola.

Hasta hace unos años la estructura holding solo la utilizaban las grandes empresas. Sin embargo, ahora, gracias a las ventajas organizativas y fiscales que aporta una holding familiar, algunas familias empresarias de tamaño medio se atreven a apostar por ello para garantizar el futuro de la empresa familiar y de su patrimonio.

Eso sí, es importante que, para evitar duplicidades o pérdida de información, la comunicación entre las distintas sociedades y en el seno de la familia sea fluida y transparente. Este inconveniente, típico de la estructura holding, no suele ser grave en una holding familiar cuando se tiene en marcha un Consejo de Familia, ya que este órgano de gobierno precisamente fomenta el intercambio de información.

¿Por qué constituir una holding familiar?

La principal ventaja de tener una holding familiar es que simplifica la gestión, pues es como si se tratara de una única empresa. En la matriz del grupo empresarial se centraliza de forma coordinada la gestión de las distintas compañías. En lo referente a la propiedad, los familiares solo participan de forma directa en la matriz de la sociedad holding. Además, ante instituciones financieras o autoridades públicas, se considera que es una única entidad y no como distintos negocios más pequeños. Esto transmite una imagen de solidez y solvencia que facilita el acceso al crédito, por ejemplo.

Por otro lado, los beneficios fiscales abarcan a todo el grupo empresarial. Una holding familiar reduce la carga fiscal en lo relativo al Impuesto sobre Sucesiones y Donaciones y al Impuesto sobre el Patrimonio. En el Impuesto de Sociedades, se permite tributar en consolidación fiscal, lo que significa compensar los beneficios/pérdidas de unas sociedades con los beneficios de las otras. Asimismo, no habrá retenciones entre empresas por dividendo, arrendamientos de inmuebles e intereses ni existirá la obligación de documentar operaciones vinculadas.

Por último, la Holding familiar permite separar responsabilidades y disminuir el riesgo empresarial. Las distintas ramas de actividad son independientes entre sí, de forma que, si una línea de negocio no va bien, no afecta a las demás. También facilita la reinversión de los excedentes de una empresa en otra. E, incluso, es posible que cada rama de actividad esté dirigida de forma independiente por una rama de la familia, especializada en ese sector en concreto, aunque siempre bajo el control de la sociedad matriz.

Otros tipos (más avanzados) de holding familiar

No obstante, tened en cuenta que, en este artículo, nos hemos limitado a mostar una estructura de holding simple. En la práctica, cuando muchas ramas familiares son propietarias de un patrimonio empresarial complejo, lo más frecuente es encontrarse con que cada rama familiar posee su propia holding familiar. Esta estructura, mucho más compleja y todavía novedosa en empresa familiar, la dejaremos para un próximo artículo.

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