Dirección: Travessera de Gràcia 15, Entl 2ª – Barcelona / Correo: info@fb-solutions.es   / Teléfono: 93 467 21 59

conflictos en la empresa familiar

¿Por qué los conflictos son más complejos en la empresa familiar?

conflictos en la empresa familiar

En Family Business Solutions vemos a diario como los conflictos en la empresa familiar suelen revestir de una mayor complejidad que en las empresas no familiares. Los conflictos son un fenómeno que podemos encontrar en todas las organizaciones y podríamos decir que son inevitables. Sin embargo, en una empresa familiar, la complejidad aumenta, debido a la superposición de los sistemas familia-empresa, que funcionan de forma muy diferente.

Mezclar familia y empresa lleva muchas veces a que la lógica de la razón y la lógica del corazón entren en conflicto. Para la gran mayoría de familias empresarias suele ser difícil separar el componente emocional de las decisiones empresariales y combinar las relaciones basadas en el afecto con los intereses económicos.

Un ejemplo recurrente que ilustra la complejidad de los conflictos en la empresa familiar es el de no saber qué sombrero llevamos puesto. A menudo, cuando estalla un conflicto, puede ser complicado distinguir cuando estamos delante de un conflicto con un hermano, un primo o un padre, o cuando lo tenemos con un jefe, un subordinado o un socio que, además, es nuestro familiar.

Y a esto hay que añadirle otro factor de riesgo: ser miembros de una misma familia no implica necesariamente tener una buena relación y mucho menos ser compatibles como socios. El caso más claro lo vemos en sociedades de hermanos: dos miembros de una misma generación pueden ser perfectamente complementarios (talantes parecidos, mismos valores y con una visión compartida) o totalmente antagonistas (personalidades distintas, valores opuestos y sin una visión compartida). No podemos pasar por alto que una empresa familiar se hereda de los padres, por lo que uno no puede elegir a los socios con los que compartirá la gestión y dirección del negocio.

Aprender a resolver los conflictos en la empresa familiar

Para ir acabando este artículo, tal y como ya os avancé hace en otro post sobre la importancia de abrazar los conflictos, quiero incidir en que los conflictos en la empresa familiar, de por sí, no son malos. No debemos ver los desencuentros como momentos de peligro para las relaciones familiar o como tiempos de cambio, de tensión o de incomodidad, sino como una oportunidad para abordar temas delicados y anticipar y prevenir problemas mayores. Mi recomendación para todas las familias empresarias es que aprendáis a gestionar los conflictos de la mejor forma posible, con respeto, calma y serenidad y con la firme voluntad de acercar posturas y de buscar lo mejor para el negocio.

En mi experiencia, es importante que aprovechéis los desacuerdos como momentos para expresar los distintos puntos de vista de los miembros de la familia empresaria. Eludir una discusión no ayuda a mejorar el problema. En cambio, afrontarlo es una oportunidad para resolverlo, y para ello una comunicación fluida y transparente es fundamental. Si actuáis así, de bien seguro que conseguiréis reforzar los vínculos de la familia y del negocio y evitaréis que los conflictos en la empresa familiar afecten negativamente a la armonía familiar y a la eficiencia empresarial.

2 respuestas a “¿Por qué los conflictos son más complejos en la empresa familiar?”

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *